En la D.O. Bierzo la Godello es la variedad blanca que gobierna por excelencia. Hasta ahora. Una nueva rival surge para cuestionar su dominio: la Doña Blanca. En otras ocasiones las habíamos visto unidas, pero nunca por separado. Aunque mucho menos cultivada, la Doña Blanca —también autóctona del noroeste de España— realiza una entrada por todo lo alto gracias a Andrea Mufatto y su vino Andrea Mufatto Doña Blanca. 

Desde el principio hasta el final la elaboración de Andrea Mufatto Doña Blanca supuso todo un reto. Este proyecto, liderado por la enóloga Andrea Mufatto, surge tras el encuentro con César Márquez, donde germinó la idea de elaborar blancos en el corazón de la D.O. Bierzo. El camino de esta aventura estuvo plagado de obstáculos. El primero de ellos fue localizar las cepas de esta variedad ya que, a diferencia de otras uvas, la Doña Blanca se encuentra dispersa por distintos viñedos. En el caso de Andrea Mufatto Doña Blanca la mayoría de ellos se hallaron en Ponferrada, en una viña vieja de más de 30 años. Y esto tan sólo fue el comienzo ya que una vez que se localizaron, tocó cultivar, vendimiar y ver cómo se comportaba en la bodega.

Tras ser procesadas y molturadas, Andrea Mufatto Doña Blanca se trasiega a los depósitos de fermentación, donde las levaduras arrancarán a trabajar de forma espontánea en barricas de 228 litros. Aquí mismo, sin realizar ningún tipo de removido ni bâtonnage, Andrea Mufatto Doña Blanca pasará casi dos años en contacto con las lías, aportando al vino cuerpo y carácter. El resultado final fue totalmente sorprendente, mostrando un blanco fascinante. Tradicionalmente la Doña Blanca había sido subestimada. Hasta hoy. La Doña Blanca ha llegado para quedarse. Y no podría haber tenido mejor presentación que con Andrea Mufatto Doña Blanca.

Composición Varietal

100% Doña Blanca

Región

Bierzo, España

Elaboración

Fermentado en barricas de roble usadas.

Crianza

24 meses sobre lías.

Notas de Cata

Vista: Color amarillo pálido con reflejos dorados, limpio y brillante. Nariz: Aromas intensos y complejos que combinan notas de frutas blancas maduras, como manzana y pera, con sutiles toques florales y un fondo mineral característico de los suelos de pizarra del Bierzo. Boca: Entrada suave y envolvente, con una acidez equilibrada que aporta frescura. El paso por boca es cremoso y sedoso, con un final largo y persistente que deja una impresión de elegancia y autenticidad.

Maridaje

Ideal para acompañar pescados y mariscos, arroces, ensaladas y quesos frescos.

Alcohol

12,7%

Enóloga

Andrea Mufatto